Declaración del Instituto Independencia a raíz de los sucesos en Haití
Una vez más el suelo de la Patria Grande se mancha de sangre. Un implacable magnicidio ha tenido lugar en un país que debería ser reverenciado por los latinoamericanos: Haití, el país donde por primera vez en la historia humana triunfó una revolución de esclavos. El asesinato del presidente Jovenel Moïse y el intento de asesinato de su señora esposa por parte de un organizado grupo sicario extranjero se ha sumado a la crisis endémica que sufre el país.
La situación que desde hace décadas vive Haití es el resultado más dramático y acuciante de la balcanización de América Latina. Una América Latina unida hubiera salido, hace tiempo, en ayuda de Haití y hubiera sido garante de una pacífica salida política a la crisis humanitaria que allí se vive. La patria de Toussaint Louverture y de Petion contribuyó decisivamente en la campaña independentista de Hispanoamérica. Fue Petión quien facilitó el regreso de Simón Bolívar al continente para retomar la campaña libertadora. Y los argentinos tenemos con Haití una deuda de gratitud que viene de los tiempos de la infame Revolución Libertadora. Fue el embajador Jean Brierre, fino poeta haitiano, y su esposa quienes dieron asilo en la embajada a los militares peronistas, entre los que se encontraba el general Tanco, que se alzaron contra la dictadura de Aramburu y Rojas, en 1956. En esas circunstancias la esposa del embajador Brierre, Thérèse, enfrentó resueltamente a un pelotón de la Marina de Guerra que había ocupado, contra todos los principios del derecho internacional, la embajada.
Que los EE.UU. no intenten meterse nuevamente en los asuntos de Haití. Detrás del atentado se huele la mano ensangrentada de la CIA u organizaciones criminales similares que operan a las órdenes del estado norteamericano. Preservar la continuidad institucional de Haití y evitar la intervención extranjera y hacer consultas con los gobiernos amigos, como el de México, muy cercano al Mar Caribe, deberían ser las premisas de nuestra cancillería, en consonancia con los principios que ha venido desarrollando desde el 10 de diciembre de 2019.
Buenos Aires, 7 de julio de 2021
Mesa Directiva del Instituto Independencia